Gig Economy ¿Oportunidad para Centroamérica?

¿Te has puesto a pensar en la transición de los modelos de ingresos con el pasar de los años? Antes, era común pensar que debíamos estudiar, graduarnos, adquirir un empleo y dedicarle gran parte de nuestros días a una jornada laboral por una retribución económica fija a fin de mes, “sin importar” qué tan productivo haya sido.

En la última década se ha puesto “de moda” ser un trabajador autónomo en lugar de trabajar dentro de una empresa, por la misma razón han surgido muchos freelancers o autoempleados, todo esto debido a la proliferación de plataformas digitales de empleos y tareas cortas. Estos trabajadores practican tales modelos de ingresos con la única intención de poder generar recursos económicos en un mercado saturado de profesionales, con falta de oportunidades de empleo local y con un alto costo de vida.

La revolución industrial trajo consigo el modelo de trabajo fijo, con puestos más especializados y con una dedicación del 100% de su tiempo, esfuerzos, conocimientos y experiencia para un solo empleador; antes, para las personas, esto tenía sentido, el pertenecer a una sola empresa, adquirir antigüedad, derechos y crecer profesionalmente por años en una misma organización. Hoy en día esto parece aburrido, estancamiento o no nos brinda la satisfacción que buscamos. 

Actualmente estamos en la revolución digital, la que ha abierto la posibilidad de que la nueva generación, cansada de jefes tradicionales y poca cultura de trabajo en equipo, haciendo tareas repetitivas, sin poder formarse ni mantenerse actualizados, con limitaciones de tiempo, y otra serie de malas experiencias al trabajar en empresas así pueda ser dejado atrás y aprovechar los beneficios de la economía del conocimiento y del trabajo remoto (oficina en casa, viajar y trabajar).

Pero… ¿Es la Gig Economy la solución de la nueva era? Pues esta economía digital está retando a las nuevas generaciones a ser más competitivos, gracias a ellas se ha generado trabajo y mayores ingresos en startups, también ha despertado el interés de esta generación en resolver y crear plataformas que solucionan problemas que no han sido atendidos, aumentando la competitividad y generando trabajos en múltiples áreas.

La “Gig Economy”, conocida como la economía de encargos o de una duración determinada, predomina la comunicación digital, plataformas de intermediación (marketplace) dónde oferta (empresas) y demanda (trabajadores) se unen y se realizan transacciones digitales. 

Cabe resaltar que este tipo de trabajos temporales no solo han beneficiado a estudiantes, pasantes o personas no profesionales sin empleo, también ha ayudado a generar mayores ingresos a profesionales como abogados, consultores, artistas, contadores, financieros, mercadólogos, editores, fotógrafos entre otros. 

La economía de encargos ha permitido atender y dar servicios digitales remotos a personas y empresas fuera del país de su nacionalidad o residencia y recibir dinero del extranjero. Una gran ventaja es que ésta economía no encierra un círculo limitado de personas, adultos y jóvenes que pueden beneficiarse y lo mejor de ésto es que ganas por tu productividad y no es determinada si te despiertas temprano o te duermes tarde, sino por la cantidad de tareas que logres hacer en la cantidad de tiempo que le dediques y te sea solicitada. 

La población de Centroamérica tiene una gran oportunidad para diversificar sus ingresos y ponerse varios pasos adelante en la economía digital, que ayuden a traer divisas a la región y algunas actividades o profesiones puedan ser mejor remuneradas. 

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